martes, 15 de diciembre de 2009

Lección 12 - 4º Trimestre - La segunda generación: Amonestación




Durante esta semana vemos un repaso de los puntos fundamentales que Dios estableció en el pueblo como recordatorio a la siguiente generación.

En un principio, antes de cruzar el río Jordán, Dios pide un censo del pueblo de los varones de 20 años para arriba,la conclusión es increíble, del primer censo a este último, la diferencia de la población es de mil personas. Increíble este dato viendo las calamidades que el pueblo de Dios pasó por sus malas decisiones. Esto nos muestra que Dios es maravilloso con su pueblo, podéis comprobar esto en los siguientes textos bíblicos: Números 26:1-4, Números 26:52-56

La situación del censo era para la distribución de la tierra, Dios quería que la tierra tuviera equidad en el reparto, por eso la distribuye por el número de población tal y como podemos ver en Números 27:1 al 11.

Aquí nos habla de la petición justa de de las hijas de Zelofehad, y un razonamiento que nos muestra que Dios deja que razonemos y si el razonamiento va en armonía con el pensamiento con Dios, Él sabe actuar como lo demuestra en el capítulo de Números 27.

Una de las preocupaciones de Moisés era la de la aceptación por parte del pueblo al que le había de suceder. Era importante primero que Moisés consultara a Dios, ya que es señal de sometimiento a su Creador, por otro lado es importante obedecer a Dios tal y como lo expresó, por eso Moisés hizo tal como Dios dijo en el caso de Josué y fue presentado ante la asamblea y Dios mostró que fue el elegido por El para seguir guiando al pueblo. Dura responsabilidad de Josué que tenía delante de sí para conquistar la tierra de Canaán.

El martes nos lleva a reafirmar a esta nueva generación el sistema de sacrificio de expiación por todo el pueblo y de las fiestas que tenía el pueblo, esta generación nueva no habían visto el mandato de Dios, solo lo habían escuchado de sus padres, pero tenían que tener una experiencia íntima con Dios para reafirmar y comprender que a donde iban era la tierra prometida a sus padres.

A pesar de que tanto los de Rubén, los de Gad y media tribu de Manasés quisieron quedarse en este lado del Jordán y esto no estaba en los planes de Moisés, como probablemente no lo estaban en los planes de Dios, es curioso que estas dos tribus y media valoraron más el estar en el lado del jordán que conocían pero que no quisieran pasar a la tierra prometida, nos puede mostrar que nosotros estamos en este lado del jordán pero pidamos a Dios de no ir a la canaán celestial porque estamos mejor en este lado, personalmente me es inimaginable este hecho, ya que desde el principio Dios prometió una tierra de leche y miel. A pesar de este hecho, el compromiso de los de Rubén y Gad como la media tribu de era la de luchar hasta que todos tuvieran su tierra en heredad. Este compromiso se llevó a cabo y podemos ver en el libro de Josué como llegaron hasta el final.
Manasés

Queridos amigos la lección de esta semana personalmente me lleva a profundizar en mi vida para saber donde estoy más a gusto, donde me gustaría ir y como me gustaría ir. Que Dios nos ayude a vivir aquí conforme a su voluntad, y desear el paso del río jordán espiritual para llegar a la canaán espiritual.

Que Dios te bendiga

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