Sábado 5 de junio
LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA:
1 Reyes 19:2-18; Salmo 27; 42; Lucas 8:14; 10:38-42; Romanos 8:35-39; 2 Corintios 12:9, 10; 1 Tesalonicenses 5:16, 17.
PARA MEMORIZAR:
“Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto esperaré. Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad” (Lamentaciones 3:21-23).
Durante esta semana valoraremos el significado del optimismo desde el punto de vista de nuestra relación con Dios, el optimismo nos llevará tanto a la felicidad y ese estado de ánimo proporciona curaciones milagrosas.
Tenemos que reconocer que el creer en Dios nos proporciona un añadido más a nuestro estado de ánimo, esto no quiere decir que en algún momento de nuestras vidas no pasemos por dificultades, la cuestión es que cuando estamos en medio de una desesperación sabemos la dirección a tomar, nos cuesta el esfuerzo, porque comenzamos a desconfiar de la ayuda del Espíritu Santo, pero si en esos momentos confiamos mucho más en Dios, salir de cualquier circunstancia difícil es más factible.
Domingo 6 de junio: DEPRESIÓN Y DESESPERACIÓN
Estaba un domingo en una de las iglesias que pastoreo, en una conversación con hermanos, sin ninguna transcendencia aparente, me llevó a entrar en una crisis de ansiedad que por tiempo había aparcado en mi vida, el resultado fueron nueve meses de sufrimiento, de los cuales cuatro me los pasé tomando medicamentos, a tal punto de no poder levantarme del sofá. Soy pastor, predico sobre el amor de Dios, predico sobre la responsabilidad como cristianos que tenemos a la luz del conocimiento que Dios nos ha otorgado, predico de la alegría de vivir con Cristo y sentir la protección del Espíritu Santo, pero la verdad es que estaba en medio de una crisis de ansiedad que podría haber deparado una depresión profunda. Sufría yo y sobre todo mi esposa e hija. Sabía y conocía la salida, pero no la tomaba, era tal la situación que tenía miedo de tomar el camino. Tuve que reconocer mi debilidad para poder acudir a un médico y que pudiera atenderme.
En nuestra vida espiritual ocurre lo mismo, pensamos que estamos bien como estamos y no nos damos cuenta que no estamos acudiendo diariamente al Médico de los médicos, y cuando menos lo esperamos nos damos cuenta que estamos vacíos.
El texto del Salmo 42 lo entiendo, lo acepto y quiero compartirlo con todos, la única solución para no caer en una depresión es acudir diariamente a Cristo confiado en que Él va a solucionar todos los problemas. Aunque seamos pastores, servidores de Dios, todos pasamos por momentos de angustias, por eso el texto de 1ª de Reyes 19:2-18 nos muestra que al final el Señor vendrá con su silbido apacible para hacernos sentir que está a nuestro lado.
Lunes 7 de junio: LOS CUIDADOS DE ESTA VIDA
Los textos bíblicos que aparecen en el lunes nos muestra los dos tipos de cuidados, el de este mundo se quedará aquí o se pudrirá, pero el que busca a Dios tendrá no solo cuidados aquí, sino también en el cielo.
Martes 8 de junio: REGOCIJAOS SIEMPRE
El secreto de la felicidad está en la oración, cuando buscas constantemente a Dios, todos los placeres de este mundo desaparecen y aparecen los placeres celestiales, por eso podemos estar siempre gozosos, porque reconocemos que nuestro gozo pleno no está aquí, sino cuando estemos con Cristo en la eternidad.
Los siguientes textos de Romanos 8:31;8:35-39;1 Juan 3:1; Apocalipsis 21:4 nos muestra lo que hemos estado diciendo, aquí vemos la seguridad de aquellos que confían plenamente en Dios, renovaran sus fuerzas en Cristo y el Espíritu Santo les guiará a los pies del maestro.
Miércoles 9 de junio: RISA Y CURACIÓN
Estimados amigos y hermanos, en este día, el texto bíblico de 2ª Corintios 12:9-10 nos muestra hasta que punto estamos con Dios, a El no le importa tu debilidad, sino que estés en continua conexión con Él.
Jueves 10 de junio: UN CORAZÓN ALEGRE: ¡OPTIMISMO PRÁCTICO!
El texto de Proverbios 17:22 me hace elevar, ya que por regla general soy una persona muy alegre, bueno, he sido una persona muy alegre, el hecho de que Satanás utilizara a hermanos y compañeros para hacer daño a mi ministerio me hizo retraer mi felicidad y ser más cauto, lo que pasa es que el error mío es pensar que tengo que estar alegres con los demás y mostrar mi optimismo hacia los demás, ese error es el que nos lleva a desilusionarnos siempre, por lo que ahora muestro mucha más alegría con mi Dios, mucho más optimismo con mi Dios que con los demás, el resultado es totalmente diferente, ya no siento la necesidad de confortar a los demás, sino la necesidad de que Dios me utilice para confortar a los demás Él. Que gran diferencia y que gran responsabilidad ante mi Dios. Por eso hago mías las palabras del profeta Isaías 26:1-4
Viernes 11 de junio
Deseo dejar aquí los comentarios de la hermana White, inspirados por Dios y de gran beneficio para todos aquellos que quieran ponerlo en práctica.
“Nada tiende más a fomentar la salud del cuerpo y del alma que un espíritu de agradecimiento y alabanza. Resistir a la melancolía, a los pensamientos y los sentimientos de descontento, es un deber tan positivo como el de orar. Si somos destinados para el cielo, ¿cómo podemos portarnos como un séquito de plañideras, gimiendo y lamentándonos a lo largo de todo el camino que conduce a la casa de nuestro Padre?” (MC 194).
“Sin la Cruz, el hombre no podría unirse con el Padre. De ella depende toda nuestra esperanza. De ella emana la luz del amor del Salvador, y cuando al pie de la Cruz el pecador mira al que murió para salvarlo, puede regocijarse con pleno gozo, porque sus pecados son perdonados. Al postrarse con fe junto a la Cruz, alcanza el más alto lugar que pueda alcanzar el hombre” (HAp 173).
“Con esta esperanza de una herencia segura en la Tierra Nueva se regocijaban los cristianos primitivos aun en tiempos de dura prueba y aflicción” [Y a continuación el párrafo transcribe 1 Pedro 1:6-9] (HAp 427).
Conclusión
Espero que con ayuda de Dios todos vayamos mejorando nuestra vida en armonía con el cielo para sentir el gozo y la paz que Cristo nos da.
Que Dios os bendiga.
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